
El poeta español Rafael Alberti (1902-1999) dedicó con Nana de la cigüeña, perteneciente a su conocida obra Marinero en tierra, unos versos a esta ave.
En solo dos estrofas Alberti nos transmite su sensibilidad hacia el sencillo canto (el crotoreo) de las cigüeñas, que aún podemos encontrar en lo alto de los campanarios.
Que no me digan a mí
que el canto de la cigüeña
no es bueno para dormir.
Si la cigüeña canta
arriba en el campanario,
que no me digan a mi
que no es del cielo su canto.
Para leer más:
Rafael Alberti: Marinero en tierra. Editorial Seix Barral, Barcelona, 1985.